Hay películas que se quedan en la memoria colectiva, hay muchas razones del
porqué. .Algunas son críticas sociales intensas como “El Gran Dictador” o
“Tiempos Modernos” de Charles Chaplin, o son temas históricos y épicos como
“Espartaco”, del director Stanley Kubrick y protagonizada por Kirk Douglas, “El
Cid” con Charlton Heston y Sophia Loren, “El Acorazado Potemkin” de Sergey
Einseintëin; grandes historias de amor como “Romeo y Julieta” de Franco Zeffirelli,
basada en la obra de teatro de William Shakespeare; “Lo que el viento se llevó”
basada en el libro del mismo nombre; que están llenas de fantasía y nos
transportan a mundos mágicos como “El Mago de Oz”, la saga de “Harry Potter”, la
saga Star Wars o que nos llevan a mundos desesperantes y sin salida como
“Requiem por un sueño”, “Trainsporting” o “Naranja Mecánica”.
El cine es considerado como el séptimo arte, y con mucha razón, pues en él
están involucrados otros cientos e inclusive miles de artes, todas unidas con
un fin común contar una historia. Muchas veces nos sentamos a ver los filmes,
sin importarnos todo lo que hay detrás de ellos, es decir las actuaciones, el
maquillaje, la escenografía, fotografía, la dirección de cámaras, la iluminación,
el sonido y un largo etcétera.
Si bien el cine nació como un experimento de la fotografía, gracias a los
hermanos Lumiere, jamás la ha hecho a un lado. Uno de los grandes directores de
fotografía de México y del mundo Gabriel Figueroa, quien realizó películas al
lado de Emilio “El Indio” Fernández, John Houston (director estadounidense y
padre de Angélica Houston), Luis Buñuel y otros. Gabriel Figueroa siguió la
escuela que creo Sergei Einseintëin director de cine de la Unión Soviética,
amigo de Chaplin y realizador de películas como “El Acorazado Potemkin”,
“Alejandro Nevsky”, “Iván El Terrible” y “¡Que viva México!”. Einsentëin viajo
a México con motivo del triunfo de la Revolución Mexicana decidido a mostrar a
México ante el mundo, Einsentëin dijo que si había un pueblo que comprendía los
sufrimientos del pueblo Ruso, era México, pues ambos pueblos habían sufrido las
mismas humillaciones por parte de los gobernantes.
Además de la fotografía, otros de los padres es el teatro. Chaplin fue uno
de los primeros en llevar la comicidad y la crítica social del teatro y las
carpas a la pantalla, siempre amenizado por la música de una pequeña banda o un
fonógrafo. Algunas de sus obras maestras son: “La quimera del oro”, “Tiempos
Modernos”, “El Gran Dictador”, “Candilejas”, “Un Rey en Nueva York”.
“La quimera del oro” nos habla de la obsesión que se creó en EUA, con
respecto a las minas de oro, en varias ocasiones durante la película vemos las
peripecias de Charlotte, que van desde comer un zapato asado hasta sobrevivir a
una tormenta invernal que se lleva la casa, y la más importante sobrevivir a la
ambición de uno de sus ex compañeros de búsqueda, que intenta matarlo a él y
otro amigo; finalmente Charlotte y su amigo salen sanos, salvos, con chica y
mucho oro.
“Tiempos Modernos”, “El Gran Dictador” y “Un Rey en Nueva York” son a la
fecha sus tres películas más polémicas, pues en ellas Chaplin mostro sus
tendencias socialistas, además de hacer una caricaturización del Führer,
en una época en que Hitler y él fascismo eran amados a nivel mundial. En
“Tiempos Modernos” nos cuenta la historia de un trabajador de fábrica de los
años 30 (del siglo XX) aproximadamente, quien es explotado por sus jefes al
grado de que enloquece, es enviado a psiquiátrico, y cuando sale se ve inmerso
en una manifestación socialista en la que es apresado y enviado a la cárcel, a
la cual volverá en más de una ocasión por distintos motivos. Las dos grandes
problemáticas de la película son el fuerte desempleo producto las depresiones
económicas del capitalismo y el cómo la gente intenta sobrevivir a estas. Lo
más importante es que a lo largo de la película Charlotte siempre sigue
optimista, nunca se rinde.
Por otra parte “El Gran Dictador” fue una crítica directa a Adolf Hitler
y Benito Mussolini, además fue la primera y única película donde Charlotte
habla. En este filme un barbero judío (Chaplin) es herido durante la Primera
Guerra Mundial, y se recupera cuando Adenoil Hinkel (Chaplin) toma el poder en
Tomania, país donde vive el barbero, la aventura se centra en la lucha del
“getto” judío cuyo principal defensor es el barbero, contra los abusos de las
tropas de Tomania. Mientras tanto Hinkel ha comenzado un plan para conquistar
al mundo por lo que llama a su homologo el represante de Bacteria Benzino Napolini, una burla directa a Benito
Mussolini. La escena más polémica de la película es donde Hinkel juega con un
globo terráqueo simulando conquistarlo, esto fue polémico porque Hitler era
amado a nivel mundial, (aquí en México grandes de la cultural como Antonio Caso
catedrático de la UNAM, parte del grupo de los jóvenes ateneos que luchó contra
el régimen de Porfirio Diaz, se declaraban fascistas, el Pentatlón intentaba
imitar a las hordas juveniles nazis). La aventura llega a un punto en que el
barbero es enviado a trabajos forzados a un campo concentración (en ese momento
se desconocían como eran los verdaderos campos de concentración NAZIS) del cual
logra escapar y sin proponérselo suplanta a Hinkel quien acaba de invadir un
país vecino, y se encuentra frente a las tropas de Tomania y de Bacteria, el
barbero pronuncia un discurso, aquí es donde se ven todas las ideas sociales de
Chaplin, pues el discurso era abiertamente anti-fascista, además de socialista.
Para realizar el filme Chaplin estudio los discursos de Hitler, imito sus
ademanes, gestos y entonaciones, la película se estrenó unos días antes de la
invasión de Polonia que diera inicio a La Segunda Guerra Mundial. Años después
Chaplin declaro que de saber cómo eran los campos de concentración NAZIS no
hubiera realizado “El Gran Dictador”.
Las primeras películas eran simple, muchas veces eran solo fragmentos de la
vida cotidiana, pero cuando comenzaron a contarse historias se necesitó de un
elemento extra: los efectos especiales aparecieron. Los primeros en utilizarlos
fueron los magos, que hacían desaparecer a personas frente a los ojos de los
espectadores algunos aterrados y otros maravillados. Los efectos avanzaron y
pasaron de apariciones y desapariciones en pantalla, a intrépidas peleas con
cocodrilos como en Tarzán con Johnny Weismuller, y otros efectos simples, pero
la película que marco una pauta nueva, fue un gorila que escalaba el Empire
State, “King Kong” en 1933, hasta entonces los efectos especiales eran un
elemento exta en la narrativa, “King Kong” llevó a un efecto especial a nivel
protagónico, pues la estrella era el gorila que había visto la luz gracias a
una técnica de animación: el “stop motion” (emoción detenida), técnica de
animación de esculturas realizada cuadro por cuadro. En ese entonces un niño se
impresiono con el gorila, su nombre Ray Harryhausen, años más tarde Ray
mejoraría el nivel de los efectos especiales al experimentar entre otras cosas con
pantallas de color verde y azul, y fomento cambios en los estándares de los
efectos especiales, sus principales contribuciones fueron las películas de
aventuras como “Sinbad el marino”,” Los siete viajes de Sinbad”, “Jasón y los
argonautas” y “Furia de Titanes”.
Muchos otros han seguido la línea que ha dejado Harryahausen personas como
Joe Johnstone director y maestro en efectos especiales culpable de que a
Harrison Ford ayude a destruir la “Estrella de la Muerte” en “Star Wars” o de que
vea el poder del arca de la Alianza, en Indiana Jones y los cazadores del arca
perdida o de hacernos correr, gritar y huir de dinosaurios en un fallido parque
de diversiones en “Jurassic Park”. Stan Winston fue un grande que dio “vida” a
monstruos como el Alien reina en “Aliens” y el terrible “Depredador”; al T101,
T1000, TX, T800, en la saga “Terminator”, y uno de sus últimos trabajos
permitió a Robert Downy Jr portar la famosa armadura de IRON MAN. Los efectos
han ayudado al cine de gran manera al mejorar la narrativa, haciéndola más
creíble, gracias a esto podemos disfrutar de extraterrestres que invaden la
tierra, viajes espaciales, viajes en el tiempo, carreras en carromato, hechizos
de magos, máquinas que buscan controlar o destruir a la humanidad, parques de
diversiones con dinosaurios y muchas cosas más, desgraciadamente los efectos
son un arma de doble filo, pues actualmente más de una película pone más
énfasis en los efectos que en las actuaciones o la historia un desagradable
ejemplo a mi gusto es la saga “Transformers” del director Michael Bay. Si bien
la primera parte es una película buena, la segunda abusa por completo de los
efectos especiales, de los chistes sexuales malos, las actuaciones son pobres,
en especial la de la bella Megan Fox y la trama es incoherente en más de un
punto. Nota me considero fan de los “transformers” y aun así no me acaba de
convencer la segunda película.
Es interesante ver la evolución del cine de efectos especiales, el auge con
las películas de la época de la Segunda Guerra Mundial, donde proliferaban las
tramas de vaqueros, invasiones extraterrestres y viajes interplanetarios. Después
de la guerra el cine se volvió más sombrío y realista, los efectos fueron
hechos a un lado. En esta ola surgieron cineastas con Pier Paolo Pasolini quien
igualmente maravilló y horrorizo a las audiencias con películas como los
cuentos de Cantbury, Las mil y una noches, Edípo Rey, Salo o los 120 días de Sodoma.
El cine Pasolini era crudo, sexual, político, y hermoso, sin embargo la
intolerancia y los remanentes del fascismo terminaron con Pasolini, que fue
asesinado por un grupo fascista, ya que además de comunista Pasolini era homosexual.
En 1977 George Lucas comenzó una historia de fantasía y ciencia ficción de
nombre de Star Wars, la historia está muy influenciada por el escritor Joseph
Cambell (“El héroe de las mil caras”), las películas de aventuras de los años
40, mitos y leyendas de todo el mundo, la Segunda Guerra Mundial y el cine de
Akira Kurosawa, más específicamente “La fortaleza escondida” y “Los siete
Samurais”.
Estos filmes de Kurosawa nos narran aventuras del Japón feudal. La primera
es la historia de dos campesinos que venden sus tierras para ir a la guerra,
con la esperanza de obtener fortuna, pero son demasiado cobardes para la
guerra; para regresar a su nación, pasan muchas peripecias, la más importante
es su encuentro con un samurái que protege a la Princesa del País de la Luna y
es entonces donde comienza su verdadera aventura. Al final son recompensados
por ayudar a la princesa y al samurai a escapar de su país que ha sido
invadido. Esta historia fue la que Lucas utilizo para darle vida a C3PO, R2D2,
la princesa Leia y a Obi Wan.
“Los
siete Samurai” considerada por muchos como obra maestra, también se
ubica en el Japón feudal y es la historia de un grupo de campesinos que
son atacados
por disidentes de la guerra, los cuales les quitan todo. Para
solucionarlo
envían a tres de ellos a la ciudad a buscar un Samurai que esté
dispuesto a
arriesgar su vida sólo por un plato de arroz. Cuando finalmente
encuentran a un
Samurai(Kanbei) dispuesto a la aventura éste realiza los planes para la
defensa, viendo que necesita por lo menos siete, por lo que la siguiente
tarea
es encontrar a seis más. Un joven de aproximadamente 18 años, un
borracho de más
de 30, un experto espadachín, y los restantes veteranos de guerra. Estos
siete
hombres se enfrentan a las mentalidades cerradas de los campesinos con
el fin
de enseñarles a defenderse y no depender más de los samuráis. Cuatro de
ellos
sacrifican su vida por defender a los campesinos de los atacantes, que
humildemente les pagan con los mejores platos de arroz. Con estos
personajes
Lucas reforzó el espíritu de Obi Wan, y de Luke, además de que dotó a
Han Solo
de una personalidad similar a la del personaje de Toshiro Mifume, el
Samurai
borracho, que en realidad es sólo un campesino con un título falso de
nobleza y que al final es el último samuraí en caer, y sólo después de
matar al líder de los disicidentes.
Star Wars es uno de los muchos ejemplos dela complejidad del cine, pues es
la mezcla de distintas artes: los efectos especiales, la música, la
arquitectura, el diseño de vestuario, los guionistas, la actuación, y un largo
etcétera.
El cine es la gran maravilla y herencia del siglo XX, además de que es un
conjunto de artes.